Mi primera vez...

Como no hay deuda que no se pague, ni plazo que no se cumpla, después de meses de espera y superar trabas de tiempo y espacio, dimos nuestro primer paso en esta aventura subterránea de pintar stencils en la vía pública.
Fué una noche medio adrenalínica pero de verdad emocionante. Nunca antes intenté siquiera rayar un muro, pero esta incursión la considero una acción de arte, no un simple rayado ininteligible como tantos que sí ensucian la ciudad. Para mi el stencil es un acto de liberación, de decir cosas en la síntesis de una imagen, sin más herramienta que un spray, una plantilla y las ganas de crear. Es hablar al transeunte y llamar su atención por una fracción mínima de tiempo sobre algo que dificilmente encontrará en otra parte y de otro modo.
Bueno, lo importante es que como equipo nos trasladamos al área acordada: alrededores del Parque Bustamante y Av. Irarrázabal., pasadas las 21:00 hrs del jueves 2.
La primera intervención de gak y ale no estuvo exenta de peligros, ya que tras ubicar el primer emplazamiento e iniciar el pintado, furtivamente se abrió una puerta vecina, por lo que debió terminar la acción en forma abrupta.
A medida que nos desplazábamos, encontramos muros muy apropiados, pero la inevitable ley de Murphy hizo que situaciones insólitas para el lugar y la hora se confabularan en nuestra contra (un pasaje curvo con muros vírgenes y solitarios era ocupado por ¡¡una vecina que barría la calle - no la vereda - a las 10 de la noche!!
Sin embargo estos obstáculos no impidieron que cumpliéramos con nuestro objetivo y finalmente logramos hacer por lo menos un rayado digno esa noche. Después de todo era nuestra iniciación.
Las fotos captadas al día siguiente dan muestra de nuestros primeros trabajos. Personalmente, sólo publico la imagen de sólo una aplicación de mi plantilla ya que la primera quedó impresentable (era un muro rugoso). Ya habrá oportunidad de perfeccionar la técnica.